Antes de conocer a Ingrid, he de reconocer que había muchas cosas referentes a la alimentación que desconocía totalmente.
Entendería por “Alimentación Saludable” el hecho de cubrir necesidades nutricionales con los alimentos de forma completa y equilibrada.
Creía en las dieta. Si, creía que si no me alimentaba de verde, era y sería un fracaso.
Esta pandemia me ha hecho crecer mucho y estoy encantada de haber encontrado el camino de este crecimiento de la mano de Ingrid. Dos mese después puedo decir:
¿De qué sirve una “Alimentación Saludable “ si no nutrimos nuestra alma?
He entendido que cuerpo, mente y espíritu, tienen que estar bien nutridos y en harmonía.
Ninguna prohibición tiene nada de bueno. Cuando nos restringimos alimentos, solo hacemos que alimentar nuestro deseo de consumirlo y la culpabilidad cuando lo comemos. Y no, no lo sufre nuestro cuerpo, lo sufre nuestra mente.
He aprendido que el fracaso no es no ser capaz de alimentarte de verde y perder 20kg, el fracaso es no saber quererte tal y como eres.
He aprendido a escuchar mi cuerpo, a diferenciar que tipo de hambre tengo en cada momento, a comer de forma consciente y cuidarme sin remordimientos. No es fácil, son muchos años de creencias y mitos nutricionales. Pero ahora tengo las herramientas y todo depende de mi.